Ascensión al monte Orhi

La primera montaña que desde el Atlántico supera la mágica altitud de los 2000m es el Orhi. Se trata de una preciosa pirámide de 2019m sobre la selva de Irati, el hayedo más grande de Europa, y ofrece unas estupendas vistas del arranque de los Pirineos más agrestes hacia al este.

La ascensión al pico del Orhi es una bonita excursión para montañeros adultos que puede ser completada en poco más de una hora, aunque con niños hay que tener en cuenta que puede triplicarse la duración y saber valorar los más de 400m de desnivel que tenemos que superar. Mi recomendación personal es no intentarlo con niños/as menores de 6 años salvo que estén acostumbrados a fuertes pendientes y exclusivamente en el caso de que no haya nieve/hielo.

Existen 5 puntos clásicos de partida para esta ascensión y nosotros hemos elegido el que arranca en tunel de Orhi. Desde Otsagabia tomamos la NA-140 hacia Izalzu y unos pocos kilómetros después tomamos la NA-2011 que se dirige hacia Francia. Pasamos por el acceso a las pistas de esquí nórdico de Abodi y un poco antes de la parte más alta del puerto de Larrau encontraremos el único túnel que hay. Allí, unos metros antes, a su derecha, tenemos un pequeño espacio donde dejar el coche.

Por la parte derecha de la carretera tenemos un sendero ancho y pisado que sube cruzando por encima del puente, girando para enfilar claramente hacia el Orhi entre prados y caballos. En seguida el camino se transforma en una alfombra de hierba que comienza a ascender hasta cortarse con el sendero que viene desde el puerto de Larrau y que ya no dejaremos hasta la cima.

El camino, empinado y con piedras, se asoma un par de veces a la vertiente norte de la montaña (son zonas expuestas y con mucho viento, cuidado con los más pequeños ante el peligro de caídas y el frío). Os encontrareis en varios puntos con espectaculares buitres que se acercan mucho a los montañeros en sus planeos. Un disfrute más de nuestra visita a Orhi.

A mitad de recorrido encontraremos uno de los puntos clave, una zona de roca equipada con un cable de acero de unos 10m. Aunque desde unas decenas de metros puede parecer muy expuesta, en realidad es bastante asequible y el cable tiene utilidad real solo en invierno donde el riesgo es mayor por el peligro de un resbalón.

Podemos pedir a los/as niños/as que se agarren al cable para cruzar y así podemos darle un poco de emoción a la ruta.

En apenas unos minutos más, alcanzaremos el collado de Ori Txipia que precede a la última rampa. Es un buen sitio para descansar y tomar fuerzas porque los últimos metros son quizás los más duros de la ascensión que está a punto de acabar. Tampoco es mal sitio para acabar la excursión si las fuerzas flaquean y preferimos comenzar el camino de vuelta.

En cuanto arrancan las zetas que suavizan la pendiente podemos alcanzar a ver el vértice geodésico de la cima que se convertirá en nuestra meta. Recordad a los niños que no busquen atajos y respeten el camino, tanto por ahorrar sus fuerzas como por conservar la montaña. Es difícil ver tan cerca la meta y seguir avanzando en zigzag.

El vértice de Orhi está acompañado por un original buzón con forma de hacha clavada en un leño, tras ellos la cresta cimera avanza hacia el puerto de Larrau unos 60m más ofreciéndonos un preciso balcón. El viento es fuerte y fresco todo el año, abrigaos para disfrutar del momento con comodidad.

El descenso es por el mismo camino y hay que poner atención en no confundirlo con los caminos que hacen los animales y que mueren en cualquier sitio. Las zonas más rocosas tienen cierto peligro de caídas y los niños bajarán cansados, tenedlo en cuenta para ayudarles lo necesario.

Recomendaciones:

• Es una montaña muy visitada y podemos encontrarnos las zonas de aparcamiento saturadas. Recomendable ir pronto.
• Lleva agua suficiente, no podrás rellenar las cantimploras porque no hay fuentes.
• Otoño es muy buena época para ir y gozar de los colores de la Selva de Irati desde arriba.

Datos:

• Duración: 2h de ascensión y 1h de bajada aprox. con niños.
• Desnivel: 437m
• Edades recomendadas: a partir de los 6 años